SmartFax

Smartfax es un servicio por suscripción que aumenta la funcionalidad de cualquier computadora o teléfono inteligente convirtiéndolos en máquinas de fax, lo que les permite enviar documentos directamente a las máquinas de fax.

Características:

• Funciona tanto en ordenadores como en teléfonos inteligentes
• Envíe sus documentos a cualquier máquina de fax
• Reciba sus documentos desde cualquier máquina de fax
• Los documentos se adjuntan en una interfaz de tipo correo electrónico
• Hasta 250 páginas en documentos de salida y de entrada
• Acceda a sus faxes globalmente, en cualquier momento

Smartfax es un servicio basado en Internet que permite al usuario enviar y recibir faxes desde una computadora o un teléfono inteligente a cualquier máquina de fax, tanto a nivel nacional como internacional.

El usuario puede convertir cualquier computadora o teléfono inteligente en una máquina de fax.

La configuración es simple: sólo crea una cuenta de usuario, elige un número de fax virtual y usa tu cuenta recién creada para enviar faxes. Los documentos se adjuntan en una interfaz de correo electrónico normal y luego se convierten en faxes que las máquinas de fax normales pueden leer. El documento se imprime entonces por la máquina de fax cuando llega a su destino. A la inversa, los faxes enviados a su cuenta se convierten en correos electrónicos con los documentos de fax adjuntos. Tanto los faxes entrantes como los salientes pueden tener hasta 250 páginas.

Este servicio basado en Internet permite al usuario acceder a todos los faxes enviados y recibidos en todo el mundo desde cualquier computadora o teléfono inteligente.

Smartfax ofrece un período de prueba de 30 días, durante el cual los usuarios potenciales pueden evaluar Smartfax. Después de que el período de prueba termine, el costo del servicio es de $6.95/mes. El período de prueba incluye la funcionalidad completa de Smartfax, incluyendo el acceso a los documentos almacenados y a los documentos enviados.

Smartfax ayuda a reducir el costo de mantenimiento de las máquinas de fax, potencialmente ahorrando lo suficiente para pagarse a sí mismo. Además, reduce las cantidades de papel y tóner necesarias en la oficina, ya que los faxes se reciben como correos electrónicos, ahorrando tiempo y recursos de impresión.